LOS TORTURADORES DE FERNANDO LUGO

Torturadores dictando cátedra de derechos humanos

Dijo Emile M. Cioran que el insomnio es una lucidez vertiginosa que convertiría el paraiso en un lugar de tortura, y tal parece haber ocurrido en el Paraguay convertido en infierno por los esbirros del cura Fernando Lugo. Un país donde un sector sufre insomnio por miedo a ser secuestrado por la guerrilla, y la gran mayoría sufre insomnio porque no tiene qué llevar a la boca, ambas cosas por la inoperancia gubernamental.
Es que no sólo el fantasma de la deforestación, el colapso energético, las sobrefacturaciones escandalosas y la emigración masiva afectan a este pais gobernado por la izquierda chanta y clerofascista.

También las flagrantes violaciones de los Derechos Humanos se han agudizado con el advenimiento del inquisitorial gobierno arzobispal.

Duras críticas a la situación de los Derechos Humanos en Paraguay contenía el mismo informe 2009 elaborado por el Departamento de Estado norteamericano y entregado al Congreso de los Estados Unidos.

El informe 2009 hablaba de graves abusos en la Policía, las cárceles, y control político del Poder Judicial.

El capítulo paraguayo de 33 páginas recoge denuncias sobre torturas y maltratos de detenidos por parte de la Policía Nacional para extraer confesiones o intimidar, la superpoblación de las cárceles, la corrupción y falta de independencia del Poder Judicial de las influencias políticas, la excesiva lentitud de los procesos judiciales, el espionaje telefónico de personas por parte de los organismos de seguridad del Estado, entre otros puntos.

El informe del Ministerio de Relaciones Exteriores norteamericano, a cargo de Hillary Clinton, también denuncia la violación de los derechos de poblaciones indígenas, la falta de respuesta gubernamental a sus reclamos y la violencia y segregación contra las mujeres, indígenas, personas con discapacidad, lesbianas, gays, bisexuales y personas transgénero.

Cita el caso de un fallecido, Santos Valeriano Aquino Zorrilla, quien según su padre, fue llevado antes por la Policía en Ciudad del Este y tras un intento de extorsión, liberado y luego asesinado. Ocurrió el 5 de agosto del 2009.

También menciona la falta de avance en la investigación y proceso de varios casos como el que involucró al policía Néstor Eduardo González Alonso, quien mató en Villa Hayes a un joven de 16 años al dispersar una protesta con disparos; también el intento de homicidio de Verónica Lugo en Villa Elisa; el caso del policía Gustavo Arnaldo Duarte por el asesinato del guardia de seguridad Vicente González, entre otros.

La falta de soluciones a los problemas carcelarios también le valió al gobierno de Lugo un tirón de orejas. El documento suscripto por Clinton refiere que “las condiciones de los centros de detención en general no cumplen con las normas internacionales”.

Reproduce un informe de la comisión de Derechos Humanos del Senado que habla del Estado deplorable de las cárceles en el Paraguay. “Los problemas más graves son la violencia, el maltrato, el hacinamiento, la insuficiente dotación de personal, el deterioro de la infraestructura, las condiciones de vida insalubres, y la falta de atención médica y psicológica adecuada”.

MAS INIQUIDADES OMITIDAS EN EL INFORME
Al pulcro informe norteamericano hay mucho que agregar, entre ellas la existencia de presos políticos y la colaboración norteamericana y colombiana con la represión.

El modelo represivo en el Paraguay ha logrado notorios avances, sobre todo luego del abierto acercamiento de Lugo a Colombia y Estados Unidos.

Además abrir una cacería contra activistas de izquierda en el norte del país, las detenciones arbitrarias son otro signo evidente del modelo autoritario que se intenta imponer en el Paraguay, con respaldo norteamericano.

REPRESOR, CIPAYO Y PRO-YANQUI
El gobierno del “cura represor, cipayo y pro-yanqui” al decir de la izquierda marxista, Fernando Lugo, sigue violando derechos humanos de los campesinos, por acatar órdenes de la oligarquía y el imperio.

La prensa paraguaya de hoy informa, a través de los periodistas Francisca Pereira, Osvaldo Escobar y Cayo González:

En el predio de una escuelita de escasas aulas y sin rastros de los alumnos, varios padres y madres de familia de la humilde localidad de Kurusu de Hierro, Concepción, a casi 405 kilómetros de Asunción, se reunieron en la mañana de ayer bajo la sombra de un naranjo para repudiar la actuación de los efectivos de la FOPE durante los últimos allanamientos realizados en el lugar en busca de los integrantes del Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP).

El reciente enfrentamiento de policías y miembros la guerrilla en Kurusu de Hierro, en donde murieron acribillados los suboficiales Carlos Cardozo y Lilio Giménez, está generando miedo y deserción escolar en el pequeño poblado.

MAS VIOLACIONES DE DERECHOS HUMANOS
A cuatro días del hecho, los padres de los alumnos y familiares de los detenidos por la Fiscalía en los allanamientos, decidieron organizarse y alzar su voz de protesta contra la actuación de los efectivos de la FOPE, que en una asamblea popular fueron acusados de haberles violado sus derechos humanos. Además de robos y otras vejaciones.

Mientras los padres cuestionaban las brutales acciones que presuntamente emprendieron días atrás los policías en sus humildes viviendas en busca de evidencias que comprometieran al EPP, algunos niños que estudian en la Escuela Nº 3225 de Kurusu de Hierro preguntaban cuándo tendrían nuevamente clase y sobre todo, cuándo sería liberado uno de sus maestros, Alberto Benítez, quien también fue aprehendido como presunto colaborador del mencionado grupo criminal.

La escuela, a cargo del profesor Arnaldo Cubilla, quien no participó ayer de la asamblea popular realizada en el predio escolar, está sin docentes desde el pasado jueves por temor a que surjan nuevos enfrentamientos, teniendo en cuenta que el hecho criminal ocurrió a escasos mil metros de la institución.

Los participantes de la reunión, en donde estuvieron aproximadamente 60 personas, decidieron pedir la presencia del ministro del Interior, Rafael Filizzola, para pedirle garantía a sus derechos. Además de indicar con una expresión típica del campesino para decirle al ministro Filizzola que “iñinútil parejo ha ikaigue ”. Esto al señalar la falta de eficiencia de los efectivos de la policía en la búsqueda de los integrantes del EPP. También esperan la presencia de integrantes de los Derechos Humanos, ya sea del Estado o no.

A pesar de estos ruegos, hasta ahora los figuretis de los DDHH, grandes luchadores por aparecer en la prensa, brillan por su ausencia.

GOBIERNO RECONOCE QUE VIOLA DERECHOS HUMANOS

El mismo ministro del Interior, Rafael Filizzola, reconoció violaciones de DDHH en los operativos y dijo que las denuncias realizados por algunos pobladores de Kurusu de Hierro, Concepción, por parte de los efectivos de la FOPE, fueron pasadas a la Dirección de DDHH del ministerio.

Filizzola señaló que tiene conocimiento de algunos presuntos actos violentos que pudieran haber realizado los policías durante los allanamientos en las viviendas de los pobladores en busca de los integrantes del Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP), quienes criminalmente acribillaron recientemente a dos efectivos de la FOPE.

“En todos los casos, todos los operativos se hacen con presencia fiscal y con órdenes judiciales, de todas maneras hemos recibido las denuncias y hemos encomendado a la Dirección de Derechos Humanos del Ministerio del Interior y de la Policía Nacional, para que se dé el tratamiento correspondiente”, señaló el ministro Filizzola.

Durante su visita a la comisaría 21 de Kurusu de Hierro, Filizzola recibió la visita de los familiares de algunos de los que fueron detenidos en la zona y que acreditan que sufrieron vejaciones por parte de los efectivos de la Policía Nacional, durante el operativo de allanamiento.

Emilce Martínez, hija de uno de los detenidos, denunció el maltrato de su padre y de su hermano menor A.M, de quince años, por los integrantes de la Fuerza Pública.

Al realizarse los primeros allanamientos tras el asesinato de los dos suboficiales, seis fueron los demorados en kuruzu de Hierro, y ya pasaron a la penitenciaría de Concepción, dos menores tienen prisión domiciliaria, mientras la pareja propietaria de una máquina de coser presumiblemente utilizada para confeccionar los uniformes de los miembros del EPP declararon este sábado en la Fiscalía de Horqueta y esperaban una decisión sobre su situación.

El pasado sábado, un campesino identificado como Víctor Ramón Cabrera Molinas, denunció que los efectivos de la FOPE actúan en horas de la noche, sin previo aviso y sin una orden de allanamiento. No obstante, este sostuvo que están en contra de los operativos, pero dijo que se deben hacer con respeto.

TORTURADOR DICTA CÁTEDRA AL GOBIERNO DEL CURA
Mientras esto sucede en el interior del país, en los medios de prensa adictos al gobierno luguista los torturadores dictan cátedra de civismo.
Mario Agustín Saprisa, ex viceministro de Interior, acusó a responsables de organizaciones campesinas por brindar apoyo al Ejército Popular del Pueblo Paraguayo ( E.P.P. )
Los organismos de DDHH repudiaron la aparición pública de Saprisa, calificado como criminal de lesa humanidad, especialista en tortura, y asesor de los agentes del poder real en los monopolios usurpadores de la comunicación social.
Después de dos años de esperar al gobierno de Lugo, las organizaciones campesinas advirtieron que dan 15 días para resolver el tema de la reforma agraria. Cumplido ese plazo, con el nombre de “ocupaciones patrióticas,” el campesinado lanzará un plan de recuperaciones de las 9 millones de hectáreas usurpadas por el latifundio al pueblo durante los gobiernos colorados.
Días después del anuncio de los referentes campesinos, la embajada yanqui y sus lacayos, utilizaron el asesinato de dos policías del cuerpo especial que llaman Fuerza de “Operaciones” de la Policía Especializada ( F.O.P.E.), instruidos en contrainsurgencia en la zona de Cerrito, por militares del Comando Sur de EE.UU. para criminalizar a las organizacines campesinas y frenar la lucha por la tierra.
El resultado: se denuncian torturas y violencia policial generalizada, en el marco del incremento de la militarización de las zonas en las que se preveen acciones de recuperaciones de tierra. El pueblo campesino resiste una nueva oleada de detenciones arbitrarias de en la zona norte de Paraguay, mientras las “autoridades” dejan en la impunidad los 200 asesinatos cometidos por policías o matones contratados por latifundistas.
El Movimiento Nacional de Víctimas de la Dictadura Stronista – Filial Argentina -, emitió una nota en la cual, manifiesta un repudio enérgico contra los monopolios usurpadores de la comunicación social, por permitir que criminales de lesa humanidad, como Mario Agustín Saprisa, opinen libremente, y por otro lado, repudian que en los mismos monopolios usurpadores de la comunicación social se criminalice a luchadores populares. No está demás señalar que varios de estos medios como ABC color, o radio Ñandutí, apuntalaron electoralmente la candidatura y después el gobierno del cura Fernando Lugo.
El torturador y estrella mediática que nos ocupa, según el documento, “ hizo carrera de terrorista de estado durante los gobiernos colorados, pero hoy disfruta del poder de un régimen Stronista sin Stroessner junto al resto de los criminales de lesa humanidad del régimen. Este torturador, que señala humildes referentes campesinos para que la policía y el ejército los ataque, nos aplicó picana, patadas, y agitando cobardemente su sable perseguía a una niña de dos años, hija de nuestra compañera Teresita Asilvera, gritándole: - comunista de mierda-. La niña perdió el habla durante dos semanas, cuando se repuso fue solo para ver como su madre intentaba suicidarse y evitar así las violentas torturas a las que era sometida. Aquella niña, hoy tiene graves problemas de salud.

Los hechos están ampliamente probados, denunciados e impunes. Ocurrieron durante junio y julio 1965 en la comisaria 8ª hoy 1º y no prescriben por ser crímenes de lesa humanidad. En ese centro de represión de la dictadura genocida de Stroessner, los responsables era el comisario Lovera Cañete, el sub comisario Saracho y el secretario Juan Martinez. Los torturadores eran Agustín Saprisa Nunes, Camilo Almada Morel ( alias Saprisa, ) Papilo Ortega, Benito Navarro ( de Caacupe ) y otros.

Teresita Asilvera, Fabio Queirolo , Brígido Pedrozo, Jacinto Reyes, Teresio y Nicolás Asilvera, Tranquilino Rodriguez, Alfredo, Adrian y Facundo Echeverría, Godoy, Rolón, Leandro Velazquez y otros centenares de campesinos han denunciado la impunidad de los asesinos y torturadores como Mario Agustín Saprisa Nunes.”

Algunos de los compañeros denunciantes ya no viven, pero más temprano que tarde se va a hacer justicia, señala el comunicado de la comisión por los Derechos Humanos en Paraguay, fechada en Buenos Aires, Argentina.